jueves, 6 de febrero de 2014

negación del origen, partamos

no hay génesis, decía, sólo genealogía.

y en realidad debe ser que algo está fallando ahí. es una orfandad, una cosa que nunca he tenido. vengo a mi pieza después de semanas y en mi casa hay ratones. siento mi cara con fuerza contra lo que sea que me genere estabilidad, como aspirando esa ausencia de aire, desesperadamente, como si fuera la única que me pudiera salvar de tanta falta. y sollozo indefensa, porque no tengo, nunca tuve, no tendré nunca un lugar a dónde llegar. y mi única estabilidad es aferrarme así, pedir ayuda y respirar pesado, ahogarme en "tú no entendís esta hueá", dar empujones y sentirme pésimo si, de casualidad, alguna cosa me recuerda este vacío.


culpo a mis papás por todo. no he crecido nada. hasta de que me tenga que sacar todas mis muelas.

mis papás casi no tienen dientes.

pero los tuvieron en su juventud, ellos tuvieron sus 20 años con dientes preciosos y una sonrisa envidiable.

yo no.

ellos pudieron tener su vida, "criar" hijos, etc. todo sin esta presión de que la gente se va a morir y después la gente que queda se va a matar.

pero cada vez que vuelvo a mi casa me reciben así, con tanta alegría. y ratones.

ESTA PRESIÓN CONCHADESUMADRE QUE NO DEBERÍA TENER. una constante perturbación sobre el futuro, sobre lo que está pasando y que, como ellos, decidí no tomar en cuenta.

no tengo origen, mi nombre es un intento muy fallido por tratar de instalarlo en esta familia.

pero yo no podría, en toda mi vida, hacerles el honor.